Fernando Trujillo Sanz 6 César García

La Guerra de los Cielos. Volumen 4

Avisarme cuando se agregue el libro
Para leer este libro carga un archivo EPUB o FB2 en Bookmate. ¿Cómo puedo cargar un libro?
  • Daniel Tcompartió una citahace 2 años
    —Aprecio tu apoyo en su justa medida,
  • Skipper Snipercompartió una citahace 5 años
    —Hay que discutir los matices —repuso Stil muy tranquilo—. Los menores sois peligrosos y no hablo de la guerra. Vuestra corta vida no os obliga a ver más allá de unos años, décadas, como mucho, pero no os preocupa lo que suceda dentro de un siglo. Por eso no estabais lejos de destruir vuestro propio plano antes de la Onda. Atentabais contra el orden natural, arrasabais selvas, extinguíais especies animales… Seguro que me entiendes, ¿no, Jack?
  • Skipper Snipercompartió una citahace 5 años
    Sin embargo, no era toda esa ayuda lo que Thomas más valoraba. Lo cierto era que todos, en general, habían colaborado en la medida de sus posibilidades. Los últimos supervivientes de la Tierra por fin habían olvidado sus diferencias para cooperar, y hasta las cuestiones religiosas habían quedado relegadas a un segundo plano, desplazadas por la oscura nube de niebla que se cernía sobre ellos y amenazaba con extinguir la raza humana
  • Skipper Snipercompartió una citahace 5 años
    Ahora te odio por pedirme lo que no puedo darte y mostrarme al mismo tiempo lo que más deseo. Te odio porque ya no hay solución para nosotros. Te odio porque te quiero.

    —No digas eso. He estado milenios en el Agujero escuchando que no hay solución, que no es posible. Mi presencia aquí demuestra que todo era mentira. Solo hay que luchar por lo que se quiere
  • Vanessa XMcompartió una citahace 6 años
    Yala cayó de rodillas con los ojos en blanco.
    —Te advertí de que no me enfrentaría a ti sin saber cómo vencerte. —Nilia continuó mirándolo—. Hay otra herida que te he causado sin que lo sepas.
    Alzó la cabeza y vio a Rick en lo alto de una espiral de piedra, cayendo por el precipicio. Tenía el puñal de Nilia clavado en la nuca.
    Yala expiró su último aliento cuando Rick se estrelló de cabeza contra una roca.
  • Vanessa XMcompartió una citahace 6 años
    —Ahora te odio por pedirme lo que no puedo darte y mostrarme al mismo tiempo lo que más deseo. Te odio porque ya no hay solución para nosotros. Te odio porque te quiero.
    —No digas eso. He estado milenios en el Agujero escuchando que no hay solución, que no es posible. Mi presencia aquí demuestra que todo era mentira. Solo hay que luchar por lo que se quiere.
    —Entonces eres más fuerte que yo.
fb2epub
Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)