Desde la reunificación de Alemania en 1990, los jóvenes marginalizados y con pocas perspectivas de futuro, quienes han adoptado las formas violentas del nacionalismo racista y glorificado el pasado nacionalsocialista, han detonado preocupaciones profundas. El manejo del odio, basado en un año y medio de trabajo etnográfico con jóvenes extremistas de derecha en Berlín oriental, revela cómo éstos desafían las nociones contemporáneas de la identidad nacional alemana y los lugares comunes con los que se representa a la derecha extrema. El libro muestra una nación amenazada por sus propias contradicciones históricas y expone la lucha entre formas lícitas e ilícitas del nacionalismo, insertas en el corazón de la democracia liberal.