Eduardo Sacheri

Lo mucho que te amé

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  • Fernanda Lizárragacompartió una citahace 2 años
    No creo que sea el destino el que cruza las vidas. Ni que las almas gemelas nazcan de a pares por ahí. La vida es mucho menos sencilla que esa lógica binaria de varitas mágicas que abren los ojos y conectan los corazones.
  • Fernanda Lizárragacompartió una citahace 2 años
    No me vengan con el destino. Son apenas cadenitas hechas con eslabones de proximidades. Le quitará romanticismo, pero es lo que es.
  • Fernanda Lizárragacompartió una citahace 2 años
    Así que esto es ver sus ojos, mientras me besa, cerrados a diez centímetros de los míos. Así que esta es la textura de sus labios. Así que así de áspera es su piel algunas horas después de afeitado. Así que así huele su colonia si estoy tan cerca de él que mi nariz no encuentra otro aire para respirar que no sea el suyo.
  • Fernanda Lizárragacompartió una citahace 2 años
    no me interesa quedar como una nena caprichosa, y ya sé que la madurez es precisamente sustraernos a la inmediatez de los deseos y la dictadura de los impulsos, pero entonces me temo que nunca seré una mujer madura.
  • Fernanda Lizárragacompartió una citahace 2 años
    Soy el resultado de todos los días que llevo vividos.
  • Fernanda Lizárragacompartió una citahace 2 años
    17
    Mi vida es siempre mi vida y se define por cada uno de los días que he vivido dentro de esta vida. Cada uno de esos días la ha hecho exactamente la vida que es, y no otra distinta.
  • Melissa Cervera Nuñezcompartió una citahace 3 años
    Ese tironeo entre hacer y fingir, entre decir y sentir me está matando. Otra vez el maldito cliché.
  • Melissa Cervera Nuñezcompartió una citahace 3 años
    ¿Por qué sí o sí tiene que ser algo malo el amor?

    —Malo no, Ofelia. Pero el amor es dolor, sobre todo. Dolor y algunas cosas más.
  • Melissa Cervera Nuñezcompartió una citahace 3 años
    No sirve para nada que lo sepa. Y sospecho que es peor, eso de que lo sepa. Pero ya ve, se lo digo igual. Parece que la quiero, Ofelia. Mil perdones, pero me parece que la quiero mucho.
  • Eliana Castillocompartió una citahace 4 años
    está besando. Por un instante estoy a punto de retroceder, sacudir la cabeza, pegar un grito. Por suerte es nada más que un instante. Al siguiente ya cierro los ojos y me dedico a sentir sus labios en los míos. También siento mi corazón galopando. Y sus manos en mi espalda a la altura de la cintura. Y el perfume de su piel y la temperatura de esos labios que no paran de besarme. Y su espalda debajo de mis dedos, lo que significa que no solo estoy devolviéndole el beso sino el abrazo. Lo más asombroso es que lo que está sucediendo es mucho mejor que lo mejor que me había atrevido a imaginar que podía suceder. Y yo que me conformaba con mirarlo con intensidad. Y yo que en mis fantasías más alocadas me imaginaba murmurándole que lo quería.
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