Estaba comprobando personalmente que no era tan fácil resistirse a los encantos de aquel hombre… Chrissy Gable había decidido no dejarse deslumbrar por su guapísimo nuevo jefe, Nate Barrett, un hombre con reputación de playboy. Pero no tardó en descubrir por qué Nate resultaba tan irresistible para las mujeres… ¡Su único atractivo no era la cuenta del banco! De pronto, a Chrissy no le importaba quedarse a hacer horas extras con Nate, aunque supiera que estaba poniendo en peligro su corazón.