En un futuro remoto y utópico, un estudiante se enfrenta a la tarea de escribir un texto académico sobre las ficciones del pasado. Una de las condiciones del trabajo, acaso la más difícil, es que un lector de comienzos del siglo XXI sea capaz de comprenderlo. El argumento de este relato, “Logos”, esconde la clave para entender Réplica, una indagación sobre la familia, la percepción que los demás tienen de nosotros, la infancia, la identidad sexual y la incapacidad de delimitar con palabras el misterio y la angustia de vivir. En sus páginas aparecen patos de peluche indistinguibles, un padre radiactivo, un joven cuyo parecido con Enrique Bunbury condiciona sus relaciones personales, un autor que escribe una novela cómica que todo el mundo se toma demasiado en serio y muchos otros personajes perdidos, casi absurdos, que no logran entender el mundo que habitan, un mundo luminoso y terrible al que en ocasiones sólo logramos acercarnos por medio de la ficción.