Jesús Miguel Martínez, a través de ejemplos claros y casos ilustrativos, demuestra
cómo las estrategias y técnicas terapéuticas del modelo existencial dialógico
pueden aplicarse en la práctica clínica para promover la reflexión, el autoconocimiento y la transformación personal.
El autor señala la importancia que tiene conocer cuál es el momento propicio para
callar, para murmurar, para sonreír, asentir, levantarse o interrumpir una frase del consultante para pontenciar el proceso de cambio.