bookmate game
Libros
Gianmarco Manfrida

La narración psicoterapéutica

Este libro es un compendio de fascinantes viñetas clínicas, citas muy variadas que, por si fuera necesario para quien no conozca a su autor, demuestran su enciclopédica cultura, y agudas reflexiones, tanto críticas como conclusivas.
Y todo ello con una referencia que habla por sí sola de la complejidad del supuesto postmodernismo que la inspira: el Modelo de las Realidades Compartidas, que Gianmarco Manfrida presenta en sociedad en este libro. Una de las claves de este modelo es que las historias terapéuticas que se “devuelven” a los pacientes, las parejas o las familias, para ser útiles deben ser plausibles, convincentes y estéticamente válidas.
La recuperación de la retórica y el concepto de la persuasión son otros de los regalos que nos hace Manfrida. No tiene desperdicio el capítulo dedicado al uso persuasivo de la comunicación escrita, tanto convencional, en forma de cartas, como aportado por la moderna tecnología, correo electrónico y sms. En todos ellos hace alarde nuestro autor de la creatividad que le caracteriza, bajo el común denominador de que “lo escrito permanece, las palabras se las lleva el viento”.
Gianmarco Manfrida ha escrito una joya que cumple a la perfección con el principio de Tirso de Molina de deleitar aprovechando. (Del Prólogo de Juan Luis Linares)
283 páginas impresas
Propietario de los derechos de autor
Bookwire
Publicación original
2019
Año de publicación
2019
¿Ya lo leíste? ¿Qué te pareció?
👍👎

Citas

  • Ricardo Mejía Lópezcompartió una citael año pasado
    sin tener en cuenta el contexto actual de vida ni la historia pasada de los pacientes y sus familias, solo se puede narrar mediante esquemas simplificados y aproximativos, renunciando a las conexiones específicas que —en segundo plano en las palabras de los clientes y revalidados por el terapeuta— podrían fomentar el desarrollo de visiones alternativas del presente y del pasado
  • Ricardo Mejía Lópezcompartió una citael año pasado
    El que inventa una trama espera que nosotros nos acordemos; y por nuestra parte no queremos que él deje hilos sueltos. Cada acción, cada palabra debería tener su valor en una trama: esa, sin embargo, tiene que estar construida economizando y limitándose a lo estrictamente necesario; aunque sea compleja, debería estar siempre pensada orgánicamente y sin pesos muertos..., y por encima de la trama..., la memoria del lector..., flotará sin tregua, reordenando y reconsiderando, descubriendo nuevos indicios y nuevos enlaces entre la causa y el efecto; y el sentido que quedará al final, no será una mera sucesión de indicios o enlaces, sino algo estéticamente compacto, que el novelista también habría podido revelar inmediatamente, pero que, si lo hubiera revelado enseguida, nunca habría sido tan bello. Y aquí estamos... frente a la belleza: una belleza a la que ningún novelista debería aspirar nunca, aunque fracasaría si no la alcanzase
  • Ricardo Mejía Lópezcompartió una citael año pasado
    En cuanto a la coherencia interna, ésta tiene que ver con la organización y el progreso del desarrollo de la historia terapéutica: constituye el hilo conductor del proceso terapéutico, también, si no es necesario que aparezca de forma lineal y clara desde el principio, garantiza la continuidad y contribuye al valor estético de la historia. De cualquier modo, en la sesión y de un encuentro a otro, incluso mediante ajustes progresivos o cambios de ruta anunciados, cada intervención reconstructiva está ligada a las anteriores y a las sucesivas. Puede ser interpretada y entendida (¡retomando a ECO...!) como insertada en una estructura de significado real; se calcula, se dosifica y se presenta en función de un contexto que incluye también las intervenciones anteriores y su feedback; permite trazar previsiones para la organización de otras intervenciones y ofrece indicaciones para continuar con la construcción en un sentido o en otro, con mayor o menor rapidez, refiriéndose sobre todo a un miembro de la familia o a la totalidad

En las estanterías

fb2epub
Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)