El castellano de hace tres siglos escribía ‘philosophía’, ‘luzir’, ‘vezino’, ‘bivir’, ‘sýmbolo’ o ‘mechanismo’. Y respecto al inglés, el dialecto londinense se convirtió en el modelo de uso en la educación, en el gobierno y en los negocios, y también era el dialecto de la gente culta y de los hablantes más ricos en todo el imperio angloparlante.