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Ben Fountain

Encuentros fugaces con el Che Guevara

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  • Yatzel Roldáncompartió una citahace 3 años
    –¿Y quién dice que la belleza y el placer no son útiles? –disparó Blair, con la sensación de que Alberto volvía a hurgarle la cabeza–. ¿Acaso no buscan las revoluciones belleza y placer para todo el mundo?
  • Yatzel Roldáncompartió una citahace 3 años
    Pero quizá estar loco es eso, pensó. Que todo el mundo pille el chiste menos tú. Y si caes y se dan cuenta de que no lo pillaste, ¿luego qué?
  • Yatzel Roldáncompartió una citahace 3 años
    el pasado lo echaba de la cama como un enjambre de abejas asesinas, y a menudo el primer sonrojo de plata violácea del amanecer lo encontraba en el green descalzo y en calzoncillos, practicando putts de minigolf para despejar la mente
  • Yatzel Roldáncompartió una citahace 3 años
    Myanmar, antes llamada Birmania, había dicho su agente: un sarpullido en la entrepierna tórrida del mundo. No exactamente un dechado de corrección política; figuraba en todas las listas negras de derechos humanos y era uno de los mayores productores mundiales de heroína
  • Yatzel Roldáncompartió una citahace 3 años
    La vida allí tenía la lógica fracturada de un sueño, sus propias reglas internas. Mirar una pintura no era como mirar la pintura de un sueño; era una entrada en la corriente del sueño. Y para Mason el sueño tenía un sesgo peculiar: soñaba con hacer algo real, algo digno. Un sueño de blan, y quizá por eso tanto más frágil
  • Yatzel Roldáncompartió una citahace 3 años
    –¿Las robasteis?

    –Poco después del golpe. La mayoría en una sola noche. No fue difícil. Yo sé en qué casas tienen el arte. Algunas obras vinieron después, pero la mayoría de los artículos los conseguimos en lo que duró el golpe
  • Yatzel Roldáncompartió una citahace 3 años
    Eran tan de pesadilla esas historias que Blair se preguntaba si Hernán no estaría hablando dormido, drenando sueños que se alzaban de su inconsciente herido como gases de un pantano. Hernán tenía doce años cuando las autodefensas habían matado a toda su familia y barrido el pueblo por haber elegido alcalde a un exinsurgente
  • Yatzel Roldáncompartió una citahace 3 años
    Tanto dependía pues de la buena voluntad de los rebeldes: vivir o no de acuerdo con los ideales de sus solemnes consignas. Blair había sabido desde el principio que el honor de aquellos hombres era la mejor garantía de su vida, y con el tiempo atisbó la esperanza de haber encontrado un grupo humano con una pasión, un sentido del propósito parecidos al suyo. Parecían estar auténticamente concienciados, entregados ferozmente a la lucha; para confusión inicial y recurrente de Blair, también estaban forrados de dinero. Tenían lo último en ordenadores y móviles, uniformes elegantes, todoterrenos de relumbrón, y un potente arsenal de alta tecnología –por no hablar de walkmen y videograbadoras–, todo, según la radio, financiado por las ganancias ilícitas del narcotráfico
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