Libros
David Refoyo

Redención

  • Josué Osbournecompartió una citahace 2 años
    El amor es confuso porque no tiene bordes. El deseo trata de encontrarlos, hallar los límites. Tocarlos con los dedos. El amor es confuso porque no forma parte de las ecuaciones. No puede resolverse. Tu muerte será una incógnita alejada de las matemáticas. La física no puede explicar la pérdida. (¿Si no hubieras muerto seguiríamos juntos?) (¿Hay algo más plomizo que el olvido?)
  • Josué Osbournecompartió una citahace 2 años
    Ahora tengo treinta y seis años y soy padre. No debería serlo. Un padre incapaz de cortar las ramas inferiores y de cantar coplillas mientras riega los frutos. Un padre que no puede enseñar a su hija a montar en bicicleta. Que no ayuda con los deberes. Que silencia el relato, efímero, inmisericorde. Un padre no puede enseñar nada a su hija. Una hija. Una hija, solo una: nunca estaré preparado para verte morir
  • Josué Osbournecompartió una citahace 2 años
    QUIÉN ELIMINÓ LA MUERTE de nuestra educación sentimental. Quién decidió que nos quedáramos en casa de una prima mientras enterraban al abuelo. Quién pensó que era más prudente jugar en el parking del hospital que verlo morir. Por qué nos impidieron comprobar la voracidad del cáncer. Por qué no nos llevaron al velatorio para abrazar a las viudas. Por qué los paños calientes. Por qué crecimos sin herramientas para afrontar la pérdida. Por qué hoy todavía
  • Josué Osbournecompartió una citahace 2 años
    NO HAY SALVACIÓN POSIBLE EN LA POESÍA. El poema, un destello que se esfuma impreciso. Empujo el carrito por las calles del pueblo donde las señoras saludan y señalan. Inquieren. Yo te busco en las puertas entreabiertas. Escucho el aire por si trae tu voz, como si aún fuera capaz de recordarla. Las cruces sobresalen por encima de la tapia. Cuál es. La de piedra vieja. La del mármol que amarillea. Dónde duermes ahora desde que te llevaste el sueño. Empujo mi silencio. Las palabras cimbrean alrededor de tu nombre. Mi hija no te conoce. ¿Por qué no puedo nombrarte
  • lectorcitocompartió una citahace 2 años
    DIJE TU NOMBRE UNA VEZ y entendí que estás muerto.
  • lectorcitocompartió una citahace 2 años
    Mantenerme al margen del disparo no me salvó de la herida.
  • Zel Cabreracompartió una citahace 2 años
    nuestra educación sentimental. Quién decidió que nos quedáramos en casa de una prima mientras enterraban al abuelo. Quién pensó que era más prudente jugar en el parking del hospital que verlo morir. Por qué nos impidieron comprobar la voracidad del cáncer. Por qué no nos llevaron al velatorio para abrazar a las viudas. Por qué los paños calientes. Por qué crecimos sin herramientas para afrontar la pérdida. Por qué hoy todavía
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