En esta novela, que catapultó a Bernhard Schlink en el escenario internacional, trata de la historia de un adolescente, Michael, que tiene un amor con una mujer mucho mayor que él y, cuando va creciendo, descubre información de Hanna que no saber cómo procesar.
Además del desengaño, es también una novela sobre la culpa en el Nazismo, sobre la reflexión individual de cara a un mundo que muchas veces nos sobrepasa, sobre lo que duele colectivamente, sobre un hecho que partió al mundo.