Sin querer parecer una galleta de la fortuna, es cierto que nuestras relaciones son las que dan color y sentido a la vida en la mayoría de los casos. Un momento sólo mejora si lo compartimos con otra persona, y la mayoría de nosotros consideraría que tener una serie de relaciones estrechas y profundas es uno de los factores más importantes para crear una vida con sentido.
Si alguna vez has sabido lo que es estar verdaderamente solo, reconocerás sin duda la importancia de estas relaciones.
Y si quiere más pruebas de que las relaciones son realmente lo mejor, intente recordar los mejores y más felices recuerdos de su vida. ¿No es cierto que todos ellos tienen que ver con otras personas?
Resulta extraño, pues, que las relaciones sean algo sobre lo que nunca aprendemos demasiado. En la escuela no hay ninguna lección dedicada a las relaciones. Y cuando se trata de leer libros de autoayuda o de mejorar la calidad de vida en general, todos los consejos parecen estar dirigidos a aumentar la fuerza, la confianza o el éxito.
¿No tendría más sentido que nos centráramos en desarrollar las habilidades que llenan la vida de significado? ¿Y con recuerdos felices que apreciaremos durante el resto de nuestras vidas?