"La superioridad del poema sobre los demás géneros consiste en que el poema vuela. Vuela, si es que tiene alas. Dejo volar estos poemas. Llegarán hasta donde puedan llegar. Considero que el poema, una vez publicado, pertenece al público. El lector puede hacer con él lo que prefiera. El libro conserva la forma original como referencia histórica, pero el texto estará a la orden del día. Se transformará en canción o representación, o pasará en cualquier otra forma a integrarse como fragmento en la vida de quien llegue a su encuentro. La poesía es impredecible. El poeta es la antena que la capta por casualidad, y luego la devuelve porque es de todos. El tiempo la multiplicará, o la olvidará".