Uno de los fenómenos sociales más presentes en nuestra sociedad es el deporte: ya sea que lo practiquemos, lo sigamos en la televisión o nos demos tiempo de ir a los estadios. Cada mundial y olímpiada incluye un despliegue arquitectónico y urbanístico (no olviden que los Juegos Olímpicos de México 68 transformaron la ciudad) que deslumbra a expertos y neófitos. Por eso Marlen, Edmundo y Eduardo platican de los estadios memorables, de los espacios públicos para practicar el deporte (y aquellos que dejan su sitio a centros comerciales) y, por supuesto, de cómo algunos Juegos Olímpicos arrasaron con economías nacionales (saludos a Atenas, Montreal y Río de Janeiro). Porque siempre hay mucho más que el gol, el 4-4-2 y los carrileros... dale play.