Hatebreedercompartió una citahace 4 años
–Entonces, ¿vamos a acabar así? ¿No me dejarás volver a verte? Podrías visitarme...

Meneé la cabeza.

–Mírame –dije–. Mira mi pelo. ¿Qué dirían tus vecinos si fuera a visitarte? Te daría miedo pasear conmigo por la calle, ¡que algún hombre nos señalase con el dedo!

Se ruborizó y le vibraron las pestañas.

–Has cambiado –repitió; y yo sólo respondí:

–Sí, Kitty, he cambiado.
  • no disponible
  • Únete o inicia sesión para comentar
    fb2epub
    Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)