Grecia Reyescompartió una citahace 6 años
Mi tono de voz lo hizo percibir mi desilusión. No se movió y asintió triste.
—Kyana, no puedo cambiar lo que fui… lo siento. Yo solo puedo cambiar lo que voy a ser a partir de hoy. Comprenderé si deseas… pensarlo. Además, debes saber que vas a enterarte de cosas que ahora no recuerdo. Por lo mismo necesito sepas que no las repetiré nunca. ¡Maldición! Me avergüenza tanto. Antes… lo presumía. No entiendo cómo es que todo está cambiando tan abruptamente dentro de mí —miró las luces parpadeantes, lleno de impotencia y frustración—. Me juré, incluso, que… nunca andaría con alguien que… viniera de donde tú vienes… —susurró arrepentido—.
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