Soledad Alvaradocompartió una citahace 5 años
Así que estás esperando, incluso aunque no lo sepas, esperando a que llegue el momento en que caigas en la cuenta de que eres diferente de ellos; de que hay gente ahí fuera, como Madame, que no te odia ni te desea ningún mal, pero que se estremece ante el mero pensamiento de tu persona -cómo te han traído a este mundo y por qué-, y que sienten miedo ante la idea de que tu mano pueda rozar la suya.
  • Únete o inicia sesión para comentar
    fb2epub
    Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)