El corazón preocupado abre una puerta para ver la solución que el mundo ofrece. Es un corazón que está dividido: por un lado tiene la promesa; por el otro tiene su preocupación lógica que busca una solución lógica. Poco a poco se convierte en un terreno lleno de espinos, lleno de argumentos que hacen infructífera la semilla de Dios. El