A veces lento en el orden de sucesos, es un buen libro. Se habla de una realidad distópica, un escenario que no parece distante, la ambición de monopolizar todo lo rentable, incluso la procreación. La aniquilación de la individualidad de las mujeres y reemplazadas por contenedores silenciosos, para satisfacción del patriarcado, contrastado con los flashbacks anhelantes del personaje.