«La lujuria, el deseo, son un tema común en la literatura, pero rara vez han sido expresados con tanta poesía y profundidad» dice una crítica a este libro. En una comarca donde aún se representa a la manera antigua el origen del mundo, el sexo separa dos universos: el de los hombres, depredadores, frustrados pero terriblemente astutos, y el de las mujeres, que gira en torno a dos figuras que el escritor describe magistralmente.