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Juan Villoro

Llamadas de Ámsterdam

  • Perla Cervantescompartió una citahace 6 meses
    Sabía de sobra que nada se reparte tan bien como la envidia y que hay quienes viven para criticar los errores que no se atreven a cometer
  • Perla Cervantescompartió una citahace 6 meses
    Juan Jesús no podía aceptar un trato que incluyera expectativas que tal vez iba a traicionar.
  • Matias Chahincompartió una citahace 7 meses
    –No mames –le dijo al Tornillo–. Tengo la autoestima de un salvadoreño sin papeles.
  • Matias Chahincompartió una citahace 7 meses
    Sus colegas se referían a la empresa como “corporativo”, lo cual significaba que había pasado por exitosas depredaciones internacionales.
  • Matias Chahincompartió una citahace 7 meses
    Sus colegas se referían a la empresa como “corporativo”, lo cual significaba que había pasado por exitosas depredaciones internacionales.
  • Matias Chahincompartió una citahace 7 meses
    En algún momento se preguntó si habrían cancelado el viaje en caso de que la madre enfermara. La suposición era absurda; aquella mujer estaba hecha para extinguirse en forma fulminante, sin dar molestias.
  • Antolina Castillo Ramírezcompartió una citael año pasado
    El problema sólo podía agravarse con el tiempo; Juan Jesús evocaba a una mujer que sólo en parte existió con él, la perfeccionaba en su imaginación para hacerse el mayor daño posible.
  • Antolina Castillo Ramírezcompartió una citahace 3 años
    se tragaba los años, según aseguraba Lascuráin, y de algún modo eso era peor; ni siquiera permitió que la vida lo desgastara con provecho, merecía su “edad indefinida”.
  • Antolina Castillo Ramírezcompartió una citahace 3 años
    ¡Y estaba igualito que hacía veinte años! Ni el tiempo ni los dramas le dejaban cicatrices.

    Mi compa sigue igualito porque todavía no supera a Nuria (?) idk, a lo mejor sólo tengo la cabeza llena de cursilerías

  • Antolina Castillo Ramírezcompartió una citahace 3 años
    Sólo ella podía acompañarlo con pasos cansinos hasta la puerta y entregarlo a la lluvia sin ofrecerle la menor protección; sólo él podía salir a la lluvia sin pedirle un paraguas o al menos una bolsa de plástico. Gente que se empapaba sin importancia y aguardaba a que sus manos se secaran de cualquier modo.
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