El budismo consiste en entrenar a la mente, y un campo de entrenamiento es un método de adiestramiento ideal para el lapso de atención tan breve que caracteriza a nuestra generación. Los capítulos de este pequeño libro se pueden leer en cualquier orden, y son sencillos y fáciles de comprender. Cada historia, cada frase que inspira y cada enseñanza ofrece técnicas para mejorar la conciencia plena con las que todos nos podemos identificar. No necesitas ser un budista para sentirte motivado por las enseñanzas del Buda. Como dijo el Dalai Lama:
«No trates de utilizar lo que aprendes del budismo para ser un budista; utilízalo para ser una mejor versión de ti mismo».
Siempre y cuando te sientas motivado hoy para ser mejor de lo que fuiste ayer, no importa si son los actos caritativos de la Madre Teresa de Calcuta, la perseverancia de Gandhi o el comportamiento sereno de algún familiar cercano lo que te inspira. Independientemente de la religión, ubicación geográfica, raza, origen étnico, color, género, orientación sexual, edad, habilidad, flexibilidad o vulnerabilidad, si haces el bien te sentirás bien y si haces el mal te sentirás mal.
El budismo no se trata únicamente de meditar. Se trata de poner manos a la obra y ayudar a aliviar parte del sufrimiento en el mundo. Si estás listo para ser un soldado de la paz en el ejército del amor, ¡bienvenido al Campo de entrenamiento budista!
Puede que no haya ido a donde tenía la intención de ir,pero creo que he terminado en donde necesitaba estar.
