Aurora se encuentra entre la espada y la pared. Tiene al lado a dos chicos que la adoran, la respetan y luchan diariamente por verla sonreír, pero ella está convencida de que necesita mucho más. Para poner distancia entre ella y los muchachos y así aclarar sus ideas, decide visitar a su padre, a quien no ve desde hace casi siete años, y viajar hasta Chicago, donde se dará cuenta de que la solución no siempre está donde pensamos que vamos a encontrarla. ¿Puede un viaje cambiarte la vida para siempre?