Libros
Samanta Schweblin

La respiración cavernaria

  • Marcia Ramoscompartió una citael año pasado
    Las paredes estaban descascaradas. Casi no había muebles, salvo la mesa, tres sillas desvencijadas y dos sillones cubiertos por sábanas trasparentes por el uso, anudadas a los apoyabrazos para que no se salieran de lugar. La mujer regresó con una taza de té y la invitó a sentarse en los sillones
  • Nancy Castrocompartió una citael año pasado
    Le hablaban como si fuera estúpida porque ninguno de los dos era lo suficientemente hombre para decirle que se estaba muriendo.
  • Nancy Castrocompartió una citael año pasado
    Sabía que eso no era cierto —eso de que se estaba muriendo—, pero a veces le gustaba fantasear con esa idea
  • Nancy Castrocompartió una citael año pasado
    Quería tanto morirse, desde hacía tantos años, y sin embargo nada parecía deteriorarse más que su cuerpo. Un deterioro que no la llevaba a ninguna parte.
  • Nancy Castrocompartió una citael año pasado
    Quería morirse, pero todas las mañanas, inevitablemente, volvía a despertarse
  • Nancy Castrocompartió una citael año pasado
    Lola empezaba a temer lo peor: que la muerte requiriera un esfuerzo para el que ella ya no estaba preparada.
  • Berenice Torrescompartió una citahace 2 años
    Clasificarlo todo.
    Donar lo prescindible.
    Embalar lo importante.
  • Lourdes Rodriguezcompartió una citahace 2 años
    la pregunta lo que más le molestaba. Claramente dirigida a él, confiando solo en su opinión cuando la paciente era ella. A
  • Ana Saenzcompartió una citahace 2 años
    Era una lista breve:

    Clasificarlo todo.

    Donar lo prescindible.

    Embalar lo importante.

    Concentrarse en la muerte.

    Si él se entromete, ignorarlo.
  • Mariana Aguilar Doncelcompartió una citahace 3 años
    Por qué, si sus intenciones eran tan claras, su cuerpo volvía a despertarse cada día.
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