Tu madre lo sacrificaría todo por ti, y a menudo eso es lo que hace, porque tu salud y tu felicidad son mucho más importantes que las suyas. Cuando te haces mayor, sabes que, hagas lo que hagas, por muy mal que te comportes, siempre te querrá. Para tu madre eres un ser brillante, inteligente, guapo y especial. No puedo hablar por todo el mundo, tan sólo por mí, pero creo que así debería ser siempre. Mi madre es mi mejor amiga. El amor que siento por ella también es incondicional. Pero los hijos son egoístas. Nunca ponen a su madre en primer término. Quizá deberíamos hacerlo.