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Libros
Lorrie Moore

Quién se hará cargo del hospital de ranas

  • María José Evia H.compartió una citahace 2 años
    No era de los que te dejan saber lo que piensan, pero te dejaba mirar cómo lo pensaba
  • Patriciacompartió una citahace 3 años
    Mi infancia no tuvo narrativa; todo era apenas una combinación de aire y falta de aire: esperar que la vida empezara, que el cuerpo creciera, que la mente se volviera temeraria. No había historias ni ideas, no todavía, no realmente
  • maría fernanda almadacompartió una citahace 4 años
    La gente sola, la gente atrapada, la gente de campo, todos miraban al cielo, yo lo sabía. De alguna manera ese cielo era la salida, pero era también el testigo constante, inmutable, del antes y después de nuestras decisiones –era testigo de todas las muertes que se llevaban a las personas a otros mundos–, así que la gente tenía una tendencia a hablarle.
  • Lizbeth Pcompartió una citahace 4 años
    –Mi hogar –dice. La idea del hogar: la estafa encantadora y la evasión; rendirse al anhelo y al descanso–. Hogar, hogar, hogar
  • Vivian Díazcompartió una citahace 5 años
    Yo, por mi parte, estoy comiendo para recordar.
  • Fabián Mamanícompartió una citahace 5 años
    Estoy esperando algo proustiano, toda esa infancia olvidada.
  • Teresacompartió una citahace 25 días
    No puedo seguirlo hasta allí, donde está eso, el lugar de las heridas, somos también sin el otro. Encontrarnos allí sería entrar en la oscura furia de los extraños. Pero he acumulado una especie de paciencia, creo, vagamente parecida a tener cambio. Puedo sentir el tintineo de sus monedas. Voy a esperar a Daniel, creo: dejarlo ir y hartarse, confundirse, correr por el bosque oscuro de sí mismo. ¡El amor es perenne como la hierba! Voy a esperarlo, mi corazón en epílogo, tejer y destejer, tal vez como siempre ha sido. Voy a esperar hasta que no pueda esperar más.
  • Teresacompartió una citahace 25 días
    La estación será primavera, pero las ardillas se habrán comido los bulbos y los habrán reacomodado, de modo que un único girasol –un solo de trompeta– estará temblando en el jardín, el membrillo florido sin florecer, el suelo demasiado embarrado todavía para que haya crecido la hierba pero en un día de sol chisporroteando con moscas saliendo de los huevos.
  • Teresacompartió una citael mes pasado
    No hay un lugar en donde poner estos hechos, no como corresponde. Solo queda nuestro horror triste, nuestra vanidad moral, que no puede hacer nada. Las malas noticias del mundo, como casi todas las malas noticias, no tienen adónde ir. Las clavas a la cartelera de tu corazón. Dices mira, dices fíjate. Eso es todo.
  • Teresacompartió una citael mes pasado
    pensé que alguna vez las mujeres se habían muerto de fiebre cerebral contraída por los pinchazos de los alfileres de sus sombreros, y que aún después de tanto tiempo, era difícil ser una chica, acarrear estos cuerpos que no estaban nunca bien, heridas que necesitaban arreglos, cabezas que necesitaban sombreros, correcciones, correcciones.
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