Ana Belén Ramos

Koko

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Novela de tema fantástico y mensaje ambientalista dirigida a niños y jóvenes.
Este libro denuncia el deterioro del medio ambiente. Para la autora, dicho deterioro es resultado no sólo de la forma de vida de las personas, sino también de su indiferencia ante la naturaleza.
Koko se considera a sí misma “desordenada, desmemoriada y bastante despistada”. Es una niña que vive en el futuro, en una tierra yerma y devastada a causa de una hecatombe ecológica. Dicha tragedia fue causada por la estupidez humana. Koko tiene, además una cola similar a la de los simios que le permite trepar a los árboles. Al igual que el Ulises homérico, esta pequeña emprende un viaje lleno de riesgos y poblado de personajes peculiares. En el camino conoce a Grandia, la terrible mujer de un solo ojo, quien pretende comérsela, y a un brujo bueno llamado Jörgund, quien vive en dos mundos: el de los sueños y el de la realidad.
Este libro no está disponible por el momento.
154 páginas impresas
Publicación original
2016
Año de publicación
2016
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Opiniones

  • Scarleth Waltemath Hernándezcompartió su opiniónhace 3 años
    👍Me gustó

    Perfecto para niños, pero ya no tanto para adolescentes. La historia es interesante y está planteada en forma novedosa. Sin embargo, podría aburrir a los más grandes.

    Las ilustraciones eran geniales.

Citas

  • Mariana Nomáscompartió una citahace 3 años
    Madre Naturaleza esbozó una sonrisa ante la hermosa sencillez de aquella visión. Y suspiró pensando en lo amable y bueno que se veía el mundo a ojos de una niña. Sintió de nuevo las cosquillas que le hacían los rastrillos en la siembra, sintió que bandadas de pájaros le acariciaban la frente con sus alas, que los peces se acercaban a comer de su mano, sintió plantas y agua limpia bajo sus pies. Y dijo:
  • Mariana Nomáscompartió una citahace 3 años
    Y en ese momento, comenzaron a verse sobre la laguna imágenes de las injusticias que habían permitido los hombres. Se vieron millares de animales que eran criados como alimento encerrados en granjas diminutas donde morían asfixiados, y bosques enteros que ardían o eran talados sin descanso, plantaciones agrícolas bañadas en productos químicos, fábricas que vertían sus desechos a los ríos o al mar…
  • Mariana Nomáscompartió una citahace 3 años
    –¿No se dan cuenta de que la Madre Naturaleza está enferma porque nadie se preocupa por ella? Se está muriendo y no les importa –Koko empezó a dar patadas de rabia en el suelo.

    –¡Y qué podemos hacer nosotros! –gritó alguien a lo lejos.

    Koko apretó los puños y buscó la respuesta en su corazón, pero no la tenía porque era sólo una niña pequeña.

    Entonces sucedió algo insospechado: la Madre Naturaleza habló.

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