Ser como ellos y otros artículos

Porque toda situación es el símbolo de muchas, lo grande habla a través de lo chiquito y el universo se ve por el ojo de la cerradura.

Memoria del fuego está escrita en tiempo presente, como si el pasado estuviera ocurriendo. Porque el pasado está vivo, aunque haya sido enterrado por error o infamia, y porque el divorcio del pasado y el presente es tan jodido como el divorcio del alma y el cuerpo, la conciencia y el acto, la razón y el corazón.

«La rama tiene sus pájaros fieles», escribió el poeta Salinas, «porque no ata: ofrece».

Así estamos: ciegos de nosotros, ciegos del mundo. Desde que nacemos, nos entrenan para no ver más que pedacitos. La cultura dominante, cultura del desvínculo, rompe la historia pasada como rompe la realidad presente; y prohiíbe armar el rompecabezas.

La historia oficial, vitrina donde el sistema exhibe sus viejos disfraces, miente por lo que dice y más miente por lo que calla.

Ésta es una región del mundo gravemente enferma de bobería y copianditis. Desde hace cinco siglos, está entrenada para escupir al espejo: para ignorar y despreciar lo mejor de sí misma.

América Latina está achicada en la historia, como en el mapa.

si los países pobres ascendieran al nivel de producción y derroche de los países ricos, el planeta moriría.

da. La gente vale menos que las cosa

Razón tenían los antepasados: el mundo es un plato, y más allá se abre el abismo. Al fondo de ese abismo, yace América Latina, y todo el resto del Tercer Mundo