En el verano de 2015, una cata arqueológica en las cercanías del Santuario de Regla de Chipiona es para Álvaro el detonante para hacerse un sinfín de preguntas sobre las razones de esta excavación. Todas las preguntas a obreros y mandamases dan por respuesta el silencio total, lo que aumenta, aún más, la curiosidad de Álvaro. Ayudado por unos pocos amigos, inician las pesquisas que le llevan a relacionar la cata con los monjes del convento cercano y con la historia de Chipiona desde los tartessos, sus más lejanos pobladores, hasta la construcción del actual santuario a principios del siglo pasado. Con la ayuda definitiva de un arqueólogo de la Universidad de Sevilla, quien roba los legajos que mantiene la universidad fuera de la mirada de todos, encuentran las claves y cómo interpretar los datos ocultos en el edificio del Santuario, para poder descubrir dónde se oculta el misterio buscado bajo la arena de la playa.
La intriga y la historia se mezclan con el amor y la desesperación de una mujer que es la causa del enfrentamiento primero y, posteriormente, la colaboración entre el grupo de investigadores y el Prior del convento.
