Dos reinos antaño amigos, ahora enemigos. Una guerra que acabó con todo el futuro que ambos habían planeado. Un amor infantil ya olvidado. Una historia de traiciones, venganza, amor y valentía. Año 1857. Diana, princesa de Helian, está prometida con Derek Nerhian, príncipe de Darlhia, a pesar de que los dos son aún unos niños. Ambos reyes tienen expectativas ambiciosas sobre el futuro de sus reinos, unidos bajo ese matrimonio. Sin embargo, un horrible suceso hace que Helian declare la guerra a Darlhia, y el matrimonio de los dos niños quede anulado. Año 1868. Diana, ya una joven de dieciocho años, se va a casar con John Relow, el hijo del capitán de la guardia real de Helian. Pero todo cambia cuando la reina muere y el rey es asesinado en sus propios aposentos. Diana es acusada de ser la mano ejecutora del asesinato de su padre y se ve obligada a huir a Darlhia. Está convencida de que los Nerhian están detrás de toda su desgracia, y solo quiere vengarse. Sin embargo, su reencuentro con Derek le hará replantearse todo lo que antaño creía seguro, como el amor que sentía por John.
