Del sms al amor solo hay un paso
Me llamo Aitana, Tana para mis amigos. Y acabo de meterme en un gran lío. O estoy hecha un lío, todavía no lo tengo muy claro. Todo empezó cuando gracias a un par de copas de más (o puede que fueran tres) me armé de valor y le mandé un sms a Max… mi archienemigo… y mi amor platónico desde la prehistoria. Un sms declarándome a un número equivocado y que fue a parar a manos de un tal Dr. Amor, que no para de darme la brasa con sus consejos de pacotilla. O puede que empezara un poco antes, cuando por azar del destino (y otra de mis metidas de pata) dije una mentirijilla de nada y acabé trabajando para Max.
Ahora intento que Max no me desenmascare, mientras su estirada socia: “Alias Doña Perfecta” me hace la vida imposible. Para colmo, puede que el misterioso Dr. Amor empiece a hacerme tilín. Pero qué culpa tengo yo si estoy un poco perdida y no sé qué hacer con mi vida.
Por suerte cuento con la ayuda de Gucci, mi chihuahua, que tiene el cerebro del tamaño de un cacahuete y más mal genio que la niña del exorcista. ¡Ay, qué va a ser de mí! ¿Lograré sobrevivir antes de que Max descubra que soy una farsante? ¿Quién se esconderá bajo la identidad del misterioso Dr. Amor? ¿Conseguiré aclarar mis sentimientos antes de que mi corazón me vuelva loca?
