A través de la historia, las personas con intereses espirituales se han preguntado: ¿Quiénes serán salvos por la gracia de Dios?, lo cual ha llevado a una búsqueda profunda con el deseo de responder a dicho interrogante. Pero esto se ha dificultado a raíz de que la Biblia ha pasado por varias interpretaciones y traducciones de sus componentes tanto literarios como espirituales, lo cual ha contribuido a que sea, algunas veces, mal traducida y, en otras ocasiones, erróneamente interpretada.
Pero entiéndase que, el surgimiento de las discrepancias doctrinales a través de la historia se ha debido, en gran parte, a que las personas han aprendido de "malos" (no necesariamente “falsos”) maestros que, al no poder discernir lo que está escrito en lenguaje espiritual, han usado su propio razonamiento para tratarlo de explicar. Dicho en otras palabras; se enseña erróneamente, no porque se haya querido enseñar mal, sino porque se ha enseñado lo que no se aprendió bien.
Por lo tanto, y buscando aportar a la defensa de la fe, este libro se escribió interpretando las Escrituras desde el marco Judío gentil, que es el marco originalmente bíblico. En él se hace una descripción de las doctrinas del libre albedrío, la soberanía de Dios, la gracia y la salvación desde las perspectivas de Aurelius Agustín, Juan Calvino y Jacobo Arminio. Pero más importante aún, se pone un enfoque serio en aquello que los escritores bíblicos quisieron enseñar desde la perspectiva de Dios y Su amor por la humanidad, así como desde la perspectiva del ser humano y su necesidad de Dios.
Así que, para darle respuesta al interrogante antes formulado, le invito a ir conmigo a través de las Santas Escrituras, pues ellas son las que dan testimonio de cómo se obtienen la gracia, la salvación y la vida eterna.
