David Foster Wallace

La broma infinita

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Un lugar: Enfield, Massachusetts. A cien millas de la Gran Concavidad, un yermo radiactivo lleno de bebés mutantes del tamaño de aviones, criaturas sin cráneo y hordas de hámsters salvajes. Una época: el año de la Ropa Interior para Adultos Depend, en el Tiempo Subsidiado, en una América gobernada por el totalitarismo ecológico de la ONANA, gobernada a su vez por la oscura Oficina de Servicios No Específicados, en guerra perpetua contra el ultraviolento antiONANismo de Quebec. Una institución: la Academia Enfield de Tenis, ultraelitista y dirigida por una disciplina destinada a abolir todo placer. Surcada de túneles secretos, llena de poltergeists y provista de un gurú lamedor de sudor. Una familia: los Incandenza. James Incandenza, óptico militar del gobierno convertido en cineasta de après-garde, y su mujer, la promiscua Avril, llena de oscuras conexiones con la guerrilla de Quebec. Y sus tres hijos, Orin, pateador genial de fútbol americano y seductor transnacional; Mario, enano y deforme, cineasta como su padre y poseedor de una sensibilidad prodigiosa, y el menor, Hal, promesa del tenis juvenil y atormentado por un secreto terrible. Una película: El samizdat. El Entretenimiento. La broma infinita. Con el poder de enloqueer a todo el que la vea y destuir así la civilización. El arma perfecta por la que todos se enzarzarán en la Guerra Final por el control de América.
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2.171 páginas impresas
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Citas

  • Micaaacompartió una citahace 3 años
    Hacedlo, simplemente. Olvidaos de si tiene una razón de ser. La razón de ser de la repetición es la falta de razón de ser. Aguantad hasta que se filtre e
  • Micaaacompartió una citahace 3 años
    hay como un progreso radical hasta cierta meseta y allí uno se atasca y la única manera de salir de allí es escalar la próxima meseta por medio de una frustrante y atontada práctica repetitiva, mucha paciencia y aferrarse donde uno está.
  • Micaaacompartió una citahace 3 años
    En un caso así, no tienes nada. No defiendes nada. No tienes nada bajo los pies. Caes, no tienes a qué atenerte. Como se suele decir: «Trágicamente, involuntariamente, perdido».

    Otro silencio. A Steeply se le escapó un pedito

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