Agujero

Decía el dicho que las amas de casa gozaban de tres comidas y una siesta gratis, pero en realidad la siesta era la forma más económica y eficiente de pasar el rato

Claro, es que no es como si

«Claro, es que no es como si se lo pudiésemos pedir. ¡Te entiendo perfectamente! Yo tampoco puedo decírselo, aunque me gustaría. Me gustaría decirle que cocine

, es que no es como si se lo pudiésemos pedir. ¡Te entiendo perfectamente! Yo tampoco puedo decírselo, aunque me gustaría. Me gustaría decirle que cocine.

Hundí el sobre con el dinero en el fondo de mi bolso. No me dieron ganas ni de gastarlo ni de ingresarlo en el banco. De hecho, todavía sigue ahí. De haber continuado trabajando como es debido a lo mejor me habría ganado el «obsequio apreciativo» del verano

«Entonces… ¿vas a ser ama de casa? —Mi compañera abrió aún más los ojos—. ¡Es de ensueño!» «¿De ensueño? ¿Te parece de ensueño?» «Claro que me lo parece, que te mantengan y que puedas dedicarte a las cosas de la casa tranquilamente, a la jardinería, a hacer pan… me encantaría, ¡me encantaría!»

Este año cumplo treinta. La verdad es que me habría gustado tener un trabajo fijo, aunque fuese una vez en la vida.»

Anda, pues… ¡qué suerte! ¿O no debería decir que es una suerte?»,

Las familias son un sistema extraño, ¿no te parece? Un hombre y una mujer, macho y hembra, se aparean, ¿para qué? Para dejar descendencia. ¿Pero tiene todo el mundo que dejar descendencia?

«Bueno, en ese caso… Yo nunca haría algo así. Primero, es peligroso. Segundo, es estúpido. Tercero, causas molestias a otros inútilmente. ¿Quién te pensaste que eras, Alicia en el país de las maravillas? La niña esa que se cae en un agujero mientras persigue a un conejo, y entonces empieza una gran aventura. ¿Te pensaste que eras algo así?»