Es la visión de aquello que es posible alcanzar, de la nueva realidad que se puede crear, lo que actuará como palanca imprescindible para desplazar al miedo, a la ignorancia y a la pereza de nuestro camino. Nuestra misión como líderes de nosotros mismos, si decidimos aceptarla, no es resolver los problemas que podamos estar experimentando en cada momento, sino crear una nueva realidad mucho más apasionante, un proyecto vital mucho más ilusionante, un proyecto que movilice esas energías que todos tenemos dormidas y que urge despertar