«Apropiación» es un concepto tan usado como poco problematizado, y con la digitalización se vuelve aún más incierto. La autora sostiene
que al apropiarnos de un objeto lo hacemos también de la naturaleza y sentido de la actividad que tiene ese objeto: comunicar, organizar el tiempo, trabajar, entretener, expresar y permitir relacionarnos con los demás. Esta es la clave que permite reconocer las diferencias tanto como las articulaciones entre acceso, usos y apropiaciones.
La discusión teórica se enriquece, finalmente, con la referencia a cuatro investigaciones en las que la autora explora la apropiación digital y un colofón en que reflexiona sobre la apropiación digital en el marco de la pandemia del COVID-19.