puso una remera vieja y unos shorts, se calzó las ojotas y se ató el pelo en una cola alta para que no le molestara. Ordenó todo lo que estaba fuera de lugar, barrió el piso, limpió los muebles con una gamuza y pasó la aspiradora en las alfombras, pasó también el trapo de piso y se dedicó un buen rato en dejar reluciente el baño. La cocina no requería demasiada limpieza, porque solía pedir comida al delivery.